Desde el punto de vista etimológico, el término diacrítico proviene del griego “diakritikos” que significa diferenciar o distinguir algo.
La función principal de la tilde o el acento diacrítico es el de diferenciar significados y entonaciones entre dos palabras que se escriben igual pero no tienen el mismo significado. Básicamente esta regla es muy común en el uso de monosílabos. Es fundamental en la escritura para conceder sentido y contexto a las oraciones, principalmente en el idioma español, utilizar correctamente estos usos.
Sabemos que por regla general, las palabras monosílabas no se escriben con acento, sin embargo, existe una excepción en relación a ocho monosílabos que aparecen en el cuadro principal como lo son:
De/Dé.
El/Él.
Mas/Más.
Mi/Mí.
Se/Sé.
Si/Sí.
Te/Té.
Tu/Tú.
Veamos en mayor profundidad estos casos excepcionales:
¿Tomaste nota de los monosílabos y sus excepciones? ¡Pongámoslo en práctica entonces!
Para ello, te proponemos la siguiente ejercitación:
1. Escribí un diálogo con la temática de un malentendido utilizando los ocho monosílabos de doble acentuación.
2. Señalalos con color y colocá abajo qué clase de palabra es por su uso.
Animate a hacer este ejercicio sencillo y enviánoslo para que podamos hacerte una devolución y así seguir aprendiendo juntos. Podés hacerlo por correo a gsconsultoraeducativa@gmail.com, o por WhatsApp (haciendo click en el enlace).
¡Hasta el próximo artículo!
Prof. María Fernanda González Soler
Profesora de Lengua y Literatura
Coordinadora General de G.S. Consultora Educativa
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